Historia de la Iglesia Misión Evangélica San Pablo de Chile

La Misión Evangélica San Pablo es fundada entre los años 1943 y 1945, fechas, entre las cuales el Señor confirma la oración de los jóvenes de la avanzada Wesleyana, dando inicio a cultos en la ciudad de Lota, como una nueva misión bajo la voluntad de Dios.

En el año 1945, luego de una reunión realizada en la ciudad de Concepción, se forma el primer directorio, quedando en el acta el inicio de la Misión Evangélica San Pablo.

No obstante, hay que considerar, que el propósito comienza a gestarse mucho antes por la avanzada de jóvenes wesleyanos, que en una conferencia (lo que hoy conocemos con convención), presentaron un proyecto que en una primera instancia no tuvo buena aceptación por el directorio, al ser visto como una idea impetuosa para la época, motivo por el cual, se deja sin efecto la idea y se pospone el actual del cuerpo de jóvenes hasta que éste recapacitara.

A pesar del momento adverso, la juventud, siguió sintiendo la amonestación de parte del Señor y por segunda vez, hicieron el intento de conversar con el directorio y pastores, para que fuesen aprobadas las proyecciones propuestas, evento al que nuevamente tuvieron un “no” como respuesta.

Ante los sucesos negativos de parte de la junta directiva, los jóvenes deciden organizarse y orar todos juntos al Señor, presentando como motivo “el ablandar el corazón del directorio y del grupo de pastores” y si no fuese su voluntad, que abriera un camino para seguir buscando de su presencia.

El trabajo comenzó con ayunos, oraciones en el cerro por las mañanas y giras a pie, destacando entre ellas la gira entre Lota y Arauco.

El trabajo no fue fácil porque el caminar en aquel entonces, se hizo bajo una intensa lluvia, que llevó a la peregrinación a refugiarse en una iglesia que se encontraba cerrada en la localidad de Horcones. Unos hermanos humildes y de buena voluntad del sector, abrieron sus puertas para que el grupo de jóvenes pudiese descansar ahí.

El grupo de alrededor de 22 jóvenes, comprendió la voluntad de Dios en esta gira, puesto que, del otro lado del río Bío Bío, de un pueblo llamado Talquimávida, de la Iglesia Metodista Pentecostal, llegó a la misma iglesia donde ellos se encontraban, un grupo de hermanos comisionados por Dios para hablarles.

Así comienza la unificación de estos tres pueblos de Dios, los jóvenes wesleyanos, hermanos de la Iglesia Metodista Pentecostal y los hermanos de la Iglesia que los recibió.

El momento maravilloso vivido por lo jóvenes es sellado por el siguiente mensaje de parte de Dios:

“Hijos míos, yo les he apartado hoy por hombres valientes y mujeres de fe, vuestra obra será grande, no temáis porque Yo los apacentaré y estaré siempre a vuestro lado y tendrán por nombre Misión Evangélica San Pablo”.

Los jóvenes llegando nuevamente a sus iglesias, interceden ante el directorio para que escuchen sus peticiones, con la intención de informar lo que Dios había hecho en sus vidas.

El directorio esta vez entendió el propósito y voluntad de Dios y bendijeron a estos jóvenes para que la nueva misión fuera un pueblo grande.

Es así como vemos cumplidas las promesas de Señor, hoy tenemos una gran misión a lo largo del país y podemos dar fe que ha sido bajo la voluntad de Dios Padre, manteniendo aún la hermandad entre los hermanos Wesleyanos y nosotros los Pablinos.